Como en todo gobierno peronista, la discusión siempre está a flor, y sin desconocer el tema que más afecta y angustia a nuestro pueblo, el desborde inflacionario, proponemos analizar dos políticas que son centrales para la continuidad del gobierno: la primera, acerca del proyecto para “que la deuda la paguen los que la fugaron”; y la segunda, un impuesto a la renta inesperada. Ambas son centrales para volcar la balanza en cierto apoyo gubernamental y así evitar que la deuda que contrajo Macri no recaiga en las ya castigadas espaldas del pueblo.  Además, estás políticas nos permiten recuperar las discusiones en la calle, característica central de la militancia que necesitamos.

La primera medida presentada por Cristina Fernández, permite poner blanco sobre negro y es también, un ejercicio de memoria. El préstamo que el FMI otorgó a la administración cambiemita fue el más grande de la historia del propio Fondo, y de nuestro país, esto hay que destacarlo dado que se necesita desarmar la idea que muestra al gobierno de los Fernández como tomador de deuda tal y como el de Macri. Nos permite resaltar, además, que el préstamo fue de “esencia política” con el beneplácito de Trump y los burócratas del Fondo como David Lipton y Maurice Claver-Carone, pero por sobre todo, una estrategia de los EEUU para consolidar a la Argentina de Macri y al Brasil de Bolsonaro, en los aliados de derecha de la región, ante los cambios institucionales en sus aliados históricos: Chile, Colombia y Perú. El objetivo de las deudas externas, entre otros, es recortar la independencia económica  y los márgenes de política fiscal y monetaria para el país deudor. La medida planteada, entonces, intenta cumplir con este mandato de carácter histórico, y en el carácter práctico, conlleva exponer a los conglomerados económicos (empresas, empresarios, CEOs, accionistas, directivos, consultores, entre otros) que se beneficiaron de dicho préstamo, aprovechando el afluente de dólares baratos para ponerlos en la formación de activos externos. Una pregunta interesante que se abre es ¿Cómo y de qué modo se regula actores supra nacionales que actúan en fronteras de los Estado-Nación?

Por otro lado está la medida anunciada, pero no presentada, de que el Estado cubra un impuesto a la “renta inesperada” de aquellos sectores que se beneficiaron de “eventos extraordinarios” tal y como la guerra Ruso-ucraniana, y que les otorgo un “superávit de ganancias” aumentando su poder económico por sobre el resto de la población.  Un sector claramente beneficiado es el sector agro exportador, que, justamente hoy viernes 20, recibió atención y declaraciones del presidente y el ministro Domínguez al respecto. Si el gobierno crea los mecanismo para hacerse de esa renta puede ponerla en sostener a todavía los sectores que no se recuperaron de las pandemias macrista y del Covid. Por ello, es importante que como militancia estemos en la calle, debatiendo la propuestas de nuestro Frente y que podrían beneficiarnos e intentar salir del pozo que nos metió la derecha.

La oposición se niega a dar este debate en el Congreso, y en todo caso, dar la cara del porqué no apoyan semejante proyecto que podría beneficiar al pueblo. Elije si, dar un debate en torno a la boleta única… Acompañaron el tractorazo de principios de Mayo, y son parte del apoyo político a estos fugadores, y sobre todo, recelan de cualquier progresividad impositiva.

Es necesario que como militantes salgamos a la calle a debatir con nuestro pueblo, a dejar en claro que la deuda la tomo Macri, que es fundamental que la deuda la paguen los que la fugaron y que no recaiga en nuestros bolsillos. Tenemos que estar en la calle organizándonos como pueblo para poder darle más fuerza a nuestro gobierno y así poder avanzar en una mejor redistribución del ingreso, esto es tarea de todes, porque cuando mas participemos, más podremos torcer las decisiones en favor de los que suelen rascar la olla y lograr, una vez, dar vuelta la tortilla para nuestro lado.