Se cumple un nuevo aniversario de la guerra de Malvinas, fecha que conmueve al pueblo argentino.  Ver el archivo de época nos lleva a las imágenes de aquella(s) plaza(s) repleta y conmovida por un derecho vulnerado por la invasión inglesa. El reclamo por la soberanía de las islas, la consigna “las Malvinas son argentinas” fue la expresión de unidad e identidad de nuestro ser nacional.

Es por eso que sabiendo lo que implican las Malvinas para el pueblo argentino, la dictadura más perversa y despiadada de la historia argentina que ya sumergida y borracha en su éxito de imponer un nuevo orden económico (que generó el principio de la pobreza estructural que tenemos al día de hoy en la Argentina) se presentó frente a esa plaza diciendo “si quieren venir que vengan les presentaremos batalla”, llevando a esos jóvenes a una guerra absurda.

En el comienzo de la agonía de esa Argentina industrial, el movimiento obrero fue central para organizar el descontento de esa pobreza que se empezaba a ver y sentir, de esos primeros desocupados, de los que hablará Ubaldini en sus discursos. La consigna de la CGT Brasil era clara: “Paz, Pan y Trabajo”. El día 30 de marzo de 1982, tan sólo 3 días antes del desembarco en Malvinas y de la plaza que albergó el reclamo por la soberanía de las islas, significó una daga en el corazón dictatorial. Sumada la lucha de las Madres y las Abuelas por encontrar a sus hijas/os y a sus nietos, el movimiento obrero se construyo como el canal de los reclamos sociales urgentes.

Hoy la consigna sigue siendo las Malvinas son argentinas, soberanía es recuperar lo nuestro, por historia, por geografía y por derecho. Por aquellos soldados que no se rindieron, y eso los hace nuestros héroes.

Porque las Malvinas son argentinas y el río Paraná también.

Las imágenes pertenecen a un registro del año 2017 del Diario Infobae. El autor de las mismas es desconocido.