Sobre el regreso a clases presenciales en CABA
Por Mercedes Rabanal
Las secuelas de la pandemia no son sólo físicas o psicológicas a nivel individual. Sin duda, nos llevará varios años como sociedad lograr la recuperación del tejido social y la escuela tendrá un lugar fundamental en este proceso. Por sus múltiples funciones, es una institución clave: como ámbito de socialización, de construcción de conocimiento, como presencia del Estado en las comunidades, como garante de derechos de niños, niñas y adolescentes y entre ellos, la escuela cumple además un rol fundamental en el cuidado. Es decir que si durante determinada cantidad de horas somos les docentes quienes cumplimos con esta tarea, quedan les adultes responsables libres para trabajar, producir y generar un ingreso.
Si la escuela tiene tal importancia, tal valor, es deseable que los distintos gobiernos lo reconozcan con presupuesto acorde. De otro modo, no estaríamos reconociendo todo eso tan fundamental que sucede en la escuela y la estaríamos reduciendo a un mero depósito humano sin condiciones suficientes para la enseñanza y el aprendizaje.
Una anécdota previa
Al año siguiente de empezar a trabajar como docente en escuelas públicas (siendo estudiante, me había iniciado en instituciones privadas porque era una posibilidad laboral sin título), creo que en el 2015, ocurrió en una de ellas la presencia de ratas en el edificio escolar. Al principio, merodeaban por la biblioteca. Luego comenzamos a observarlas en lugares elevados de las aulas y pasillos: se desplazaban por unos soportes del cableado y por los tubos de la calefacción si la memoria no me falla. Desde luego que los reclamos eran constantes a la supervisión. Se realizaban desratizaciones que no tenían efecto y así estuvimos un largo tiempo. El punto de inflexión llegó un buen día en el que uno de los roedores bajó en una de las aulas, y fue abordada a las patadas…por un estudiante. Sí, un chico de escuela secundaria tuvo que matar una rata en la escuela ante el susto y griterío de compañeres y profe. ¿Quién cuida a quién en esta historia?
Para nuestres pibes la escuela es, muchas veces un lugar mejor: aún con todos los problemas y la falta de inversión, al menos el techo no se llueve, al menos hay calefacción. ¿Qué sucede cuando esas condiciones elementales no están y, por ejemplo, convivimos con ratas, o la caldera no funciona durante un año entero- como ocurrió en una escuela de Soldati-, o las viandas no llegan en buen estado? ¿Qué sucede cuando estamos peor que en casa y en casa ya estamos mal? Estamos hablando de la Ciudad de Buenos Aires, el distrito más rico. Sucede que ese lugar que es la escuela se vuelve pobre y descuidado y se vuelve peligroso, porque podemos enfermarnos. Esta situación como otras nos deben interpelar fuertemente. No sólo por el derecho a ser cuidados en la escuela que tienen niñes, adolescentes y adultes también (y esto implica condiciones edilicias y de higiene) sino también acerca de las condiciones de vida por fuera de la escuela, en las casas, en los barrios. “Hay ratas porque están construyendo en la zona”, “hay muchos mosquitos por los pastizales del ferrocarril”. La escuela es parte del barrio en el que está inserta y sufre su mismo derrotero: exigir una y otra vez condiciones de dignidad para estudiar, pero también para vivir.
(No puedo evitar en este punto pensar también en Sandra y Rubén, asesinados en Moreno en el 2018 por la desidia gubernamental de Vidal. ¿Es posible que seamos los y las docentes quienes estemos constantemente levantando a la escuela de los abandonos, de la negligencia estatal? ¿Es posible que paguemos con nuestra vida esta ausencia planificada?)
Volver en pandemia
Son estas situaciones las que nos preocupan fuertemente a docentes y familias. Nadie niega la necesidad de la presencialidad: es fundamental. Todos deseamos ese regreso y volver a encontrarnos, a habitar los espacios. Pero las condiciones deben ser garantizadas:
- Condiciones de distanciamiento: la Ministra Soledad Acuña pretende que todo el curso asista igualmente y que los que no entran en el aula, respetando el metro y medio de distancia, tome la clase en el pasillo. ¿Cuál sería en dicho caso el aprendizaje? ¿Quién estaría cuidando a esos menores?
- Condiciones de higiene: ya antes de la pandemia, los elementos de limpieza que enviaba el Gobierno no alcanzaban para nada, teniendo que destinarse recursos de la cooperadora a la compra de los mismos. El personal de limpieza es escaso: auxiliar que se jubila, auxiliar que se pierde. Ya en pandemia, para las entregas de canastas alimentarias, esta situación no se modificó ¿Por qué va a ser distinto ahora? La única verdad es la realidad.
- Condiciones de ventilación: excede mi conocimiento. Simplemente, me pregunto: ¿colocarán medidores de oxígeno en todas las aulas? ¿Cuáles son las condiciones que minimizan los riesgos de contagios? Nada ha dicho la Ministra ni el Jefe de Gobierno, sólo afirman que volveremos todos el 17/02 y que cada escuela debe presentar su plan de adecuación, como si fueran las conducciones escolares autoridades en materia sanitaria.
- Plan de vacunación: aún no existe en la Ciudad.
- Creación de cargos docentes para sostener también la virtualidad de estudiantes que pertenecen a un grupo de riesgo o conviven con.
La utilización política
Mientras el Gobierno nacional instala la necesidad de la presencialidad, planteando esquemas bimodales, la Ciudad avanza más allá de esto y claramente, para la tribuna: “¡presencialidad los cinco días de la semana para todes!” nos dicen al poco tiempo de haber reducido el presupuesto educativo una vez más, y de haber transferido una partida importante que correspondía al Plan Sarmiento (las compus, justamente) a la educación privada. En los primeros días de febrero, se estaría modificando el famoso semáforo del CFE y esperamos que esta modificación no avale la irresponsable propuesta de CABA.
Cierro con un deseo: que volver a la escuela no nos cueste la salud y la vida. Que volver y cómo volver sea con real consenso y cuidados. Para que la alegría y la necesidad de la escuela no se distorsionen ni se utilicen en campañas políticas y mediáticas.
Foto extraída de https://enfoquesindical.org/ute-exige-condiciones-dignas-para-ensenar-aprender-comercial-19-8